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domingo, 5 de mayo de 2013

De París a Madrid pasando por Barcelona y Sevilla

Durante estos últimos años, Madrid persigue con entusiasmo el tener la oportunidad de celebrar unos Juegos  Olímpicos, primero fue para 2012 después para 2016 y ahora se intentará para 2020. Parece ser que lo que ocurrió en Barcelona en el ´92 supuso tanto para la ciudad y el país que ahora Madrid quiere tomar el mismo rumbo. 

Pero vamos a lo que a nosotros nos interesa. Unos Juegos Olímpicos provocan que la ciudad tenga que prepararse para la ocasión, engalanarse como una novia el día de su boda. Barcelona se abrió al mar restaurando una zona muy degradada, Londres remodeló una zona industrial en Stratford para adecuar el parque olímpico, Río de Janeiro ha realizado una inversión muy importante para organizar los Juegos en el año 2016 mejorando instalaciones y mejorando mucho la calidad del espacio en la ciudad.

Otro de los momentos para los que una ciudad se disfraza, son las Exposiciones Universales. Ocurrió en Zaragoza con la emblemática "Gota de Agua" o el tan premiado Pabellón de España de Patxi Mangado, en Sevilla con la Expo de 1992 y en todas las ciudades que han albergado una exposición universal.

Existe un antes y un después del año 1992 tanto para Barcelona como para Sevilla en lo que a calidad de ciudad se refiere pero, ¿y si la Expo y los Juegos se hubieran celebrado en la misma ciudad? Es lo que ocurrió en París en el año 1900, exposición y Juegos Olímpicos alteran el orden de la ciudad provocando numerosos cambios que ayudan a mejorar la calidad urbana de una ciudad a la que ya en 1989 se le doto de uno de los monumentos más emblemáticos del mundo, La Torre Eiffel.

1900 para París es lo que el ensanche de Cerdá es a Barcelona, es el inicio de la modernidad. Predomina el estilo Beaux Arts. "Le petit palais", el puente de Alejandro II(con un lenguaje muy sujeto al barroco)  o la estación de Orsay, actualmente convertida en museo, son algunos de los mas importantes edificios que se construyen en aquel año. 

La Exposición universal de París trae consigo numerosos avances técnicos como las aceras móviles pero sin embargo lo que en 1900 revoluciona la ciudad es el Metro, inaugurado en este mismo año con la línea Porte de Vincennes-Porte Maillot para dar servicio a los usuarios del parque olímpico. Fruto de esta construcción son obviamente las bocas de metro modernistas que se instalan como su cabeza visible.


En definitiva y a modo de reflexión podríamos concluir ahora si afirmando que efectivamente los grandes eventos en las ciudades modifican el espacio urbano. Sin embargo yo me pregunto, ¿es necesario que la ciudad mejore para albergar un gran evento? ¿No debería mejorar simplemente por el hecho de ofrecer mejores servicios a sus ciudadanos del día a día que son al fin y al cabo los que hacen la ciudad?

 

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